El ejercicio cardiovascular, también llamado ejercicio cardio respiratorio y también ejercicio aeróbico, se ha demostrado que tiene un número de beneficios para la salud cuando se realiza sobre una base regular. Estos beneficios pueden llevarse a cabo tanto por los que están aparentemente sanos y aquellos que sufren de diversos problemas de salud.El entrenamiento cardiovascular promueve la pérdida de grasa corporal y ha demostrado disminuir el apetito en muchos individuos. Sin embargo, incluso si no reduce el apetito, los efectos de la quema de calorías del ejercicio aeróbico regular puede permitir la ingesta de calorías importante. Muchos atletas de resistencia regularmente consumen entre 3.000 a 5.000 calorías por día y siguen siendo extremadamente delgados. El entrenamiento cardiovascular, cuando se combina con una dieta equilibrada, sin duda promoverá un aumento en el tejido corporal magro y una disminución en el porcentaje de grasa corporal.
El sistema esquelético se puede fortalecer soportando las actividades que toleran peso, como caminar rápido o trotar. Esto no sólo puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar osteoporosis, sino que también puede ayudar a desacelerar el progreso de la enfermedad.
El ejercicio aeróbico es a menudo parte de los programas de tratamiento para los diabéticos cuyo azúcar en la sangre está bien controlada. Esto es debido al hecho de que el entrenamiento aeróbico aumenta la sensibilidad de las células a la insulina, para los diabéticos que se ejercitan regularmente, necesitaran menos insulina. Además, los estudios han demostrado que las personas con diabetes han sido capaces de reducir significativamente o eliminar medicamentos como la misma insulina siguiendo un programa regular de ejercicio combinado con una dieta saludable.
El ejercicio cardiovascular es a menudo un componente importante de la terapia para aquellos que han sufrido un ataque al corazón y para los que están en alto riesgo de enfermedad arterial coronaria. Tres de los principales factores de riesgo para desarrollar enfermedad arterial coronaria es la presión arterial alta (hipertensión), tabaquismo y alto colesterol en la sangre. El ejercicio cardiovascular puede jugar un papel significativo en la reducción del riesgo asociado con estos tres factores.
En primer lugar, muchas personas con presión arterial alta también tienen sobrepeso. Las sesiones regulares de ejercicio aeróbico reducen la grasa corporal y disminuyen la presión arterial. En segundo lugar, muchas personas que fuman encuentran el incentivo para dejar de fumar después de embarcarse en un programa de ejercicio aeróbico. En tercer lugar, regular la formación enérgica y cardiovascular conduce a un aumento en el nivel de lipoproteínas de alta densidad (HDL), también conocido como el colesterol “bueno”.
Las personas con artritis pueden beneficiarse del ejercicio aeróbico para ayudarles a mantener un peso corporal ideal. Programas de terapia para los enfermos de artritis debe incluir también ejercicios adecuados para ayudar a mantener el rango de movimiento articular. Esto puede ser incorporado en un programa general de ejercicios que incluye ejercicios cardiovasculares.
El ejercicio cardiovascular también se ha demostrado que disminuye los síntomas clínicos de la ansiedad, tensión y depresión. El entrenamiento aeróbico regular aumenta el flujo sanguíneo y ayuda al cuerpo a eliminar toxinas que pueden hacer que una persona se sienta mejor.
En un nivel fisiológico, el ejercicio cardiovascular disminuye la frecuencia cardiaca en reposo y el volumen del corazón aumentan. Se incrementa el consumo máximo de oxígeno, la densidad capilar y el flujo sanguíneo a los músculos activos. También aumenta el volumen de sangre total, permite la ventilación máxima y aumenta la capacidad pulmonar de difusión.
El entrenamiento cardiovascular es la plataforma para otros programas de acondicionamiento físico. La oxigenación y la salud de los vasos sanguíneos y del corazón son la base para la seguridad y el rendimiento en casi todos los esfuerzos atléticos.
